España y Francia

Cada vez que se inicia el año laboral comienzo a organizar mis futuras vacaciones y dedico muchos meses a la lectura de ciertos países, ciudades, playas, para poder organizar y decidir mejor el lugar al que viajare. Como todo amante del turismo, Europa es un lugar al que todos queremos llegar por lo menos alguna vez en nuestras vidas. Como solo contaba con veinte días libres para tomarme las vacaciones y como soy una persona que cuando viaja no se quiere perder ningún detalle de los lugares a los que voy, decidí reducir a solamente dos países para así poder conocerlos y por lo tanto apreciarlos de manera más profunda. Esos dos países elegidos fueron: España y Francia. El viaje comenzó en Madrid donde teníamos reservado un hotel a muy pocas cuadras de la puerta del sol. Esta ciudad realmente me pareció muy bonita y por sobre todas las cosas moderna, limpia y de primer mundo. Su sistema de transporte es realmente admirable, muy superior al que podemos encontrar en París. A pocos metros de la puerta del sol se encuentra la “Plaza Mayor”, que es una de las más antiguas de España. Muy cerca de la “Plaza Mayor” se encuentra la “Gran Vía”, lugar que alberga la mayor cantidad de cines, teatros, bares, etc. Es conocida por los madrileños como la Avenida que nunca duerme. Un poco alejado del centro de la ciudad se encuentra la “Ciudad del Real Madrid” o la “Nueva Madrid”. Se conoce con este nombre debido a que en este barrio se encuentra el Estadio Santiago Bernabéu. Esta parte de la ciudad es sumamente moderna y muy agradable para pasear. Luego de cinco días en esta ciudad nos trasladamos a Barcelona. La ciudad catalana es bastante pequeña y realmente muy linda para conocerla, aunque personalmente considero que Madrid es mucho más interesante. Nuestra llegada a París fue a través de un corto viaje en tren desde Barcelona. Nuestro hotel en París se encontraba en el barrio latino. En esta ciudad nos quedamos casi diez días, realmente no me arrepiento de haber decidido quedar la mayor cantidad de días en esta ciudad porque posee innumerables sitios para conocer y recorrerlos, que en pocos días no se pueden apreciar con mayor profundidad.